30.6.10

EP

El otro día en clases, la profe estaba pasando materia sobre "adulto mayor". Yo nunca he sido muy apegada... es decirrr... no fui cercana a mis abuelos, entonces mi visión de adultez mayor es "enfermedades, carga para los hijos", etc. Y llegamos al tema de las enfermedades que aquejan a los ancianos, y quizás no tan ancianos: artritis, artrosis, osteoporosis, etc. Y SAAAAAS! Lo que yo en todo este tiempo de clases no quería que llegara: "otra enfermedad que se presenta, por la falta de un neurotransmisor llamado dopamina, es la enfermedad de Parkinson... un descontrol motor... y al final así mueren los abuelitos...". Esa frase final me dejó MAL, me quedé atónita y pensando porqué yo no sabía que mi papá moriría a causa de esto, que es lo que le entendí a la profe.

Llegué a la casa a hablar con mi hermano mayor y me dijo que no, que el Parkinson no provoca la muerte... Y averiugando más, claro, no la provoca. A menos que no sea tratado, pero si el paciente responde bien a los medicamentos, que es la ley general, no muere producto de la enfermedad.

Mi papá es tan joven... pero querer salvar al mundo también lo incluye, así que vamos!

28.6.10

¿Sinceridad a través del lenguaje corporal? Mala idea!

El otro día cometí un error, "cometimos" un error. Yo y unos cuantos más, no hicimos las cosas como debíamos, no por eso mal, pero no como debíamos. Ni siquiera fue un error, ya que a uno no se le puede pedir perfección cuando no sabe como hacer algo, es más, pedir demasiado a personas que no tienen la experticia en algo, sí es un error. Y ahí estaba yo... por un lado me sentí mal, ya que no me gusta que me tiren por la cabeza lo que hago, y por otro lado no tan mal, ya que no trabajé sola, por ende, se puede atribuír el "error" a otros (sin dejar de incluirme), es decir, cuando uno trabaja solo y se equivoca, no existe opción, te equivocaste. Pero si fue más de uno, la responsabilidad no se siente tan potente.

Sí, nos equivocamos, y el indicado para "retroalimentarnos" lo hizo, y estaba todo bien. Mis compañeros y yo lo escuchamos atentos, y claramente tenía razón en ciertas cosas, no en todas, pero sí en elementos significativos como para hacernos desertar del proyecto.
Yo estaba bien, hasta que la persona encargada de darnos un feedback comenzó a contarnos que una persona de nuestro grupo le fue con cuentos (deslealtad, hipocresía), y luego, dio paso para que otras personas que no conocían del todo nuestro proyecto, nos dijeran sus CRÍTICAS PRODUCTIVAS. Mis compañeros mientras sucedía todo esto, asentían con la cabeza, pero yo leía sus pensamientos: "¿por qué él/ella está diciendo eso?". Yo me empecé a sentir fatal, no me gusta que personas que no son de mi total confianza me critiquen, no me gusta tampoco que lo hagan cuando no tengo ganas de escucharlas (egoooo), y menos si no conocían en totalidad lo que estaban criticando. No tenía ganas de hablar ni escuchar, y todo el mundo le daba vueltas al asunto.

Lamentablemente, mi cara de dos metros me delató, mi lenguaje corporal también. Las personas comenzaron a hablar de lo irrespetuosa que me comporté (mientras todos asentían, mi cabeza decía "no"; miraba para otro lado, etc). Se que no es lo correcto, se que molesta, pero no puedo arrepentirme o pedir perdón por eso! Para mí, esa es la muestra más clara de sinceridad cuando el contexto no te permite opinar.... además, no negaré que me fascina hacer enojar a las personas sin hacerles nada... es interesante que unos movimientos de cabeza, de manos y de ojos, lograsen la enajenación de algunas personas.

Ya, me desperfilé, saqué mi lado malo.

Un beso.